Los volúmenes de concreto, cristal y madera forman una trama de texturas, luces y sombres que hacen que esta residencia refleje un carácter y un lenguaje uniforme tanto en el exterior como interior.
Un proyecto habitacional en el que las lineas y los envolventes generados por los volúmenes de concreto forman el perfil de la casa enmarcando las áreas privadas y generando un aspecto de volúmenes suspendidos en el aire en donde las áreas comunes son la base de el segundo nivel.
El proyecto se desarrolló como una ampliación y remodelación de una antigua casa típica del pedregal, en un terreno de 800 m2, en donde los acabados, los espacios y las necesidades de el programa arquitectónico actual no cumplían con los requerimientos de los nuevos habitantes.
Los acabados se trasladan del interior al exterior, mientras todos los espacios conviven entre si y se genera un espacio neutral y de armonía.
El proyecto esta desarrollado en medios niveles, en donde el medio sótano alberga las zonas de servicio, y un salón de juegos. En planta baja (de acceso) encontramos las áreas comunes (sala, comedor, cocina, estudio), y un medio nivel arriba, las 3 recámaras secundarias y el family room, y en la planta encontramos la recámara principal.
La cocina, sala comedor y recámara principal, están ubicados con vista al jardín, los cuales poseen la mejor orientación y vista.
El reutilizamiento de cimbras, y materiales existentes abandonados en la obra, produjo un bajo porcentaje de emisiones, se plantearon paneles solares y sistemas de control y automatización para optimizar los recursos, y de la misma manera sistemas de filtración de agua y plantas de tratamiento para reducir los consumos tanto hidraulicos como eléctricos.
Volúmenes aislados de concreto enfatizando los espacios adyacentes como accesos y circulaciones fue el planteamiento original que se planteó para el proyecto. Un basamento ligero de cristal, generó volúmenes separados y suspendidos en las partes superiores. La madera como material cálido se interpuso ante la frialdad de los tonos, grises, blancos y negros, lo cual neutralizó el ambiente interior, al mismo tiempo que entablaba una relación intrínseca entre el interior y el exterior.
La parte mas importante estructuralmente hablando era lograr suspender visualmente los volúmenes superiores de la casa. En el caso de el estacionamiento, existían columnas inferiores, las cuales se eliminaron mediante el sistema estructural de “viga vierendeel” con estructura de concreto, liberando en planta baja todas las columnas y trasladando las cargas y volados a las partes superiores de las cubiertas en azotea, de esta manera se respetaron las losas existentes, y se logró integrar el volumen de concreto a el sistema estructural, generando cubos aparentes.